Yo tengo un elfante...
El topo gigio, los thunderbirds, capitán escarlata, los muppets, plaza sésamo, el cristal encantado, laberinto, Leyenda, carozo y narizota, chirolita, el perro alfonso.
Los que fuimos niños en la década del 70 y principios de los 80 crecimos rodeados de personajes mágicos. Estaban los dibujitos animados y las series. Había un correcaminos, un mazinger, un chavo del ocho y un súper agente 86. Pero si algo nos producía una mezcla de terror-fascinación eran esos muñecos movidos por extrañas fuerzas ajenas a las de la animación tradicional ( leasé titiriteros). Históricamente, las marionetas en su diferentes variantes se remontan hasta la Europa del siglo XV, es más “une marionette” era un clérigo que en las representaciones religiosas aportaba su voz aguda a la de la virgen maría para que pareciese femenina. El Guiñol, el Fantoche o el Polichinela son diferentes variedades de títeres que quedaron inmortalizados a través de los años.
El género a llegado a nuestros días y no es difícil encontrar espectáculos que hagan uso de muñecos articulados en sus representaciones pero ninguno al nivel de la Royal de Luxe. Esta compañía teatral fundada en 1979 por el francés Jean-Luc Courcoult , y líder en la vanguardia del teatro callejero a gran escala, ha venido representando historias de manera monumental en diferentes partes del mundo desde hace más de 25 años.
“Photo roman”, “La verdadera historia de Francia”, “El gigante caído del cielo”, “Pequeños cuentos negros”, “La Jirafa caída del cielo” Su última gran creación “El elefante del Sultán” , fue concebida para el centenario de la muerte de Julio Verne. En la historia, la protagonista, una niña de proporciones descomunales ( más de cinco metros de altura) debe viajar en el tiempo y en el espacio para encontrar a un elfante, propiedad del Sultán de las Indias, que está causando graves destrozos.
Durante los cuatro días que dura la puesta en escena de la obra, las marionetas gigantes de la niña y del elefante circulan por las ciudades/teatro junto a cientos de actores, músicos, titiriteros y equipo técnico para dar vida a las fantasías imaginadas por el escritor francés.
Luego de pasear por varias capitales europeas, la Troupe del Royal de Luxe viajó a Sudamérica en Enero para representar su historia en el casco histórico de la ciudad de Santiago de Chile en el marco del festival de Teatro Santiago a mil.
Para todos los que no se hallen entre los afortunados espectadores de este espectáculo monumental, muchas páginas entre las que se encuentren You tube o Flickr nos presentan varios videos filmados en las diferentes representaciones de la obra además de fotos de gran calidad en donde podemos observar el enorme despliegue necesario para llevar a cabo la tarea.
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