Es corta la bocha.


"Me llamo Warwick Davis. Soy el enano del Reino Unido.
Soy actor. Me habrás visto en las películas de Harry Potter.
Guía del autoestopista galáctico, El regreso del Jedi.
Ese es Wicket, el ewok, fue mi primer personaje.
No soy solamente un actor. También soy un agente.
Represento a otros enanos.
Tu sabes, He tenido mucho éxito, y es mi oportunidad para devolverles
la mano y ayudarles a encontrar trabajo."


Life's too short, como su nombre lo dice, es corta por varios lados. En la estatura de su personaje principal (1,07 metros) , en su duración (30 minutos) y en la cantidad de episodios de su primer temporada (siete).
¿Cuál es el secreto del éxito de una serie que no califica dentro de la medida estandar? En este caso: Ricky Gervais. Uno de los humoristas mas ácidos de los ultimos años.
El formato utilizado en esta oportunidad es un cruce entre un mockumentary (ese falso ducumental que tan bien funcionó en "The Office") y  un reality show de la farándula, algo parecido a lo que pudimos ver en "Extras". A decir verdad nada demasiado diferente a cualquier producto que venga de la mano del inglés. La diferencia entre esta y otras creaciones de Gervais es el grado de mala leche. Aqui parece que no hay tema tabú ni edulcorado. Desde la ridiculización extrema del pobre Warwick Davies pasando por los chistes de mal gusto general y la parodia que de si mismos hacen los actores invitados en cada episodio. Nada queda fuera de la comedia, ni el propio Gervais que vuelve sobre episodios reales como su polémica participación en los Golden Globes 2011 para añadirlos a la trama.
En resumidas cuentas, "Life's too short" es una de las pocas sorpresas que a nivel de series nos ha dejado un 2011 bastante pobre. Disfrútenla. Despacio o lento. Da igual.  De todas maneras y como sucede con todas las cosas buenas siempre va a tener gusto a poco.

Para muestra un fragmento del primer episodio con la participación de Liam Neeson.

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